No sabía de la portuguesa Ana Hatherly. Uno sabe tan poco que necesitaría otra vida si quisiera sbaer. Ahora, gracias a que nuestra paisana Casilda García Archilla ha editado Una conversación con Ana Hatherly, que es una joya visual, me pongo como loco a indagar sobre esta poeta que cultiva además de la palabra en el sentido directo la poesía visual. Pero como mis noticias al respecto son escasas, ahí va una dirección donde lo cuentan como yo no sabría hacerlo:
http://sociedaddediletantes.blogspot.com/2010/07/una-conversacion-con-ana-hatherly.html
Mientras, como me gusta jugar, se me ocurre deconversar con la poeta y con la autora de la edición con esta serie de fotografías. Espero que a ésta no le moleste. Y es que los libros están dotados, entre otras cosas, de una buena dosis de maleabilidad. No sólo por sus textos sino por las geometrías con las que nos obsequian. Esta edición cuidada y trabajada no tiene pérdida.
Genial idea y estética alternativa. No conocía a esta autora y me ha dejado pasmada, no tiene ni un rincón que no sea digno de deleitarse con la vista. Con tu permiso, te he puesto tu link en mi blog comentando tu magnífica idea. Bravo, amigo.
ResponderEliminarSaludos.
Hay muchas ideas e iniciativas que pasan desapercibidas. Anónimas o entre pocas manos, su valor (creativo, el económico es la maldad del mercado) está fuera de duda.
ResponderEliminarGracias por valorarlo (redundancia lógica)