De alguna manera es retrotraerse a la cultura made in London de los años 60, cuando el imperio mod estaba omnipresente en las calles y ambientes. Pero ésa es una parte tangencial de la imaginería que fluye en proyectos, representaciones e invenciones varias. El grupo ARCHIGRAM estuvo constituido por media docena de arquitectos que pusieron en marcha diversos experimentos teóricos de ideas arquitectónicas. Sus propuestas nos recuerdan hoy más el mundo de los cómics que el de los recursos prácticos. Y sin embargo desplegaron un montón de sugerencias en el ámbito de la construcción vinculada a los modos de vida, al consumismo creciente y al uso de materiales de vanguardia.
Espectacular es la exposición. Absorbente, porque desde que entras no dejas de contemplar imágenes, colgadas de las paredes en forma de cuadros o de enormes cartelones que caen del techo, más una serie de espacios que imaginan formas de vida consumista. El colorido y la abundancia de dibujos, planos, grafismos y fotomontajes lo llena todo y, ciertamente, a la mayoría de los que hemos pasado por la Sala el tema nos resulta nuevo. No sabes al principio por dónde cogerlo. Cuando te informas un poco casi te lo crees. ¿Qué hubo de influencia en la marcha de la arquitectura y el desarrollo de las ciudades por parte de este movimiento de experimentación más allá de la imaginación y el derroche de diseños e imágenes? Seguro que el cine de ciencia-ficción de los 60 y 70 le sacaron jugo. El paseo por la exposición no deja de divertirte.
¡Pues tengo que ir a verla!
ResponderEliminarEs pura ficción, pero casi te lo crees.
ResponderEliminarBuena noche.