diario de un vallisoletano curioso

viernes, 2 de marzo de 2012

Cuando a Odiseo no le importó Ítaca


¿Recordáis la escultura fascinante de Oteiza en el jardín junto a San Agustín, devenido ahora en Archivo Municipal? Está enfrente de Las Moreras y me regodeé abundantemente en Píllala en su día, fotografiando por doquier sus formas de piedra recreada, donde predominan las aristas hurtadas a la redondez, generando concavidades y convexidades que se me antojan formas de las foces geológicas navarras.

Ahora descubro  -torpeza la mía por entrar y salir siempre a la carrera a alguna charla o exposición-  esta escultura también de Oteiza, en hierro forjado, dedicada a Santiago Montes. Ubicada en el jardín que da acceso a la Fundación Segundo y Santiago Montes, que retrato en la entrada anterior. Me dicen que la escultura se llama Odiseo. Los artistas que cultivan la abstracción proyectan tanto sus sueños como la interpretación del mundo en sus obras. Y eso exige al espectador. Un expectador lineal nunca verá lo mismo que el artífice.

Pero ¿por qué no seguir las instrucciones que sugiere un nombre así? ¿Qué es Odiseo, qué es esta escultura? No es solo el hombre ni la aventura ni el destino improbable de Ítaca. Es el horizonte, los espacios, la abertura siempre proyectándose. Las puertas y ventanas derribadas que no pueden limitar el campo de exploración humano. Y en definitiva es el aire  -¿Eolo?-  que se mueve a través y que ni las sirenas ni los cíclopes ni Polifemo ni los los listrígones  -encarnados en la dureza del metal-  pueden detener. Porque Odiseo es el empuje, la búsqueda, el movimiento de la materia, no importa la forma que ésta adquiera.








4 comentarios:

  1. La primera vez que la veo!!!

    Gracias por el descubrimiento.

    Un fuerte abrazo!!!

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  2. Living. Ya veis que hay por la ciudad infinidad de detalles, de obras de tamaño grande, mediano o pequeño. Pero mucha gente no las advierte. Precisamente, si echáis con calma y tranquilidad un vistazo a mi blog, vereis que desde el primer día he intentado hacer fotografias sobre esa otra obra no tan visible como los grandes monumentos. Fachadas, portales, interiores, ángulos, paisajes más o menos humildes, etc. que están por todas partes.

    Hay que animar y estimular a los paisanos a que descubran la herencia histórica y patrimonial, que no siempre pasa por grandes nombres e imágenes turística, pero que no por eso son menos representativas.

    Os animo en vuestro trabajo de descubrir y recrear lo que tenemos. Y hacer que la gente pasee más a patita y mire. Saber mirar es fundamental.

    Un abrazo.

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  3. También es la primera vez que la veo. Este tipo de esculturas nunca llegaré a entender, no un poco, creo que nada de ellas. Es lo mismo que la enorme escultura en homenaje a la ciudad, que está enfrente de la Feria de Muestras, justo al borde de la Avenida de Salamanca. Otro claro ejemplo de arte abtracto. No niego su mérito pero me es imposible entender la obra.

    Por otra parte, felicitarte por el blog. Muy interesante e instructivo. Me gustan especialmente tus reflexiones. Es algo que yo en el mío no hago demasiado a menudo, normalmente por falta de tiempo.

    Un saludo.

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  4. VDPh. Gracias por pasarte, ya veo que hacemos cosas análogas, observaciones y detalles de la ciudad que nos parecen dignos de mostrar o simplemente que nos chiflan personalmente.

    Ciertamente, el arte abstracto no es nada fácil, no se ve con los ojos de la racionalidad ni con la didáctica figurativa que nos mostraron siempre ni con el aprendizaje del objeto-uso. Es otra cosa y mira que, aunque diste mucho de que me gusten todas sus manifestaciones, hay algunas que me impactan. Del mismo autor, Oteiza, hay otra obra en un pequeño jardín junto a San Agustín (o Archivo Histórico Municipal), esta vez de piedra. Puedes verla, además de in situ, claro, en esta entrada de mi blog:

    http://pillalaciudad.blogspot.com/2011/04/la-macla-de-oteiza.html

    Mi opinión, compañero de mirada, es que precisamente la cámara nos posibilita descubrimientos y no debemos nunca cerrar los ojos a lo existente e incluso a lo imaginario.

    Gracias por echar este vistazo y ya sabes, por aquí sigo. Un abrazo.

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