diario de un vallisoletano curioso

domingo, 18 de marzo de 2012

Entre el oro, el oropel y la galaxia



Uno se encuentra por la calle de todo. Supongo que estas imágenes no serán estrictamente vallisoletanas pero me las encontré por sus calles. El papelito de Compro oro estaba colocado en los parabrisas de los coches, una manera ya lejana de publicitar un nuevo club, la penúltima pelu o la anteúltima tienda de aceitunas. El objeto que compran o que venden, vaya usted a saber, ya venía anunciándose por el procedimiento de coches aparcados en la vereda. Pero nunca había visto que se intentara captar tesorería a través de las imágenes de dos personajes ciertamente involucrados en el actual momento económico del país, de una manera u otra, y a los que los electores nos les deben ver tan opuestos. 

Tal vez por esa razón también ande desplegado por las paredes el galáctico Darth Vader, no sé si ojo avizor, a la espera de una metamorfosis o en busca de una redención que no solo empeña a los políticos de la viñeta o a los personajes de Star Wars, sino a los curritos y jubilatas españoles. Todo tiene pinta de que tanto oro se va a quedar en oropel, cuando no en llanto y crujir de dientes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario