diario de un vallisoletano curioso

jueves, 26 de agosto de 2010

Una aldaba y cuatro clavos


4 comentarios:

  1. Yo recordaba esta puerta más deteriorada: http://laacequia.blogspot.com/2007/12/abrir-puertas-y-encontrar-personas.html
    Saludos.

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  2. Bienvenido, Pedro. Evidentemente, tal como dices. Pero ya ves, de vez en cuando llegan las rehabilitaciones y la mano de pintura y a tirar otros quinientos años (o los que sean)

    Me alegra que pases por aquí; me parece ver por tu blog que has tenido o tienes vínculos con Valladolid, así que puedes opinar con libertad y conocimiento cuando desees.

    Un abrazo.

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  3. Sigo tu blog desde hace tiempo. De hecho, estoy en tu lista de seguidores desde casi el principio que la colgaras. Creía haber hecho ya algún comentario, porque los temas que tratas, lógicamente, me interesan. Hemos coincidido ya en varias fotos.
    Seguiré pasando por aquí, por supuesto. No sé si otros quinientos años aunque me den una manita de pintura...

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  4. Gracias, Pedro por tu ironía y buen humor. Coincidir en visiones, ergo fotografías, significa sensibilidades análogas. La ciudad es nuestra.

    Salud.

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