La sombra de la Esgueva (nunca he sabido bien por qué nombrar al desviado río en femenino, ¿será porque el laísmo del pronombre vallisoletano se ha extendido a algún nombre propio?) es permanente. En cuanto se hacen los cimientos de alguna nueva edificación en zona de los antiguos cauces aparecen resto de canalizaciones, cloacas o puentes. El abovedamiento que se observa en la fotografía corresponde al solar donde se construye entre las calles Angustias y Magaña, calle por donde pasaba el curso natural de uno de los dos ramales (el del Norte) de la Esgueva.
Ignoro qué se va a hacer con esos restos, seguramente quedar ocultos. Aquí se aprecia sólo el exterior, pero en una imagen que he visto creo que en el blog Vallisoletum aparece una foto del abovedamiento interior, de verdadera factura romana, si bien se cree que la obra procede del siglo XVII. Cuando uno ve la de restos arquitectónicos o urbanísticos que aparecen en pleno casco histórico advierte la razón que asiste a Federación de Asociaciones de Vecinos, Ecologistas en Acción e Izquierda Unida al proponer la creación de un Parque Arqueológico en el entorno de La Antigua.
Para mayor información, ver: http://www.vecinosvalladolid.org/spip.php?article6054
Y también: http://www.vecinosvalladolid.org/spip.php?article6055
Yo siempre he oido que el apelativo femenino viene porque como era tan malo, inundaciones, foco de infecciones....debía de tener nombre femenino....
ResponderEliminarJoanna, ahí va, ¿es broma? Aunque conociendo la trayectoria machista del país todo podría ser...
ResponderEliminarGracias.
O sea, que el famoso queso "flor de Esgueva", que conozco porque era el favorito de mi padre, ¿proviene de ahí?,menudas sorpresas agradables me estoy llevando con tu blog, vallisoletano.
ResponderEliminarCon respecto a lo de las "calicatas", una forma de decir que cada vez que se escarba se encuentra algo, me ha recordado a mi ciudad, Sevilla, porque sucede lo mismo, y el complejísimo y larguísimo en el tiempo problema que ha traído de cabeza aesta ciudad y a todas las corporaciones municipales desde 1973 con el conocido como Mercado de la Encarnación, hoy ya por fin solucionado con lo que llaman "metropol-parasol (yo prefiero seguir llamándolo "mercado de la encarnación". Y me he acordado de la visita que hice este invierno al anticuarium que bajo esas enorme setas se ha dejado construido: una maravilla, un ejemplo a seguir, creo.
Espero que en tu ciudad pronto encuentren solución para estos problemas comunes en ciudades con larguísima y rica historia.
Un cordial saludo
Sofía, el "Flor de Esgueva" proviene de un valle llamado así, Valle del Esgueva. El tal río Esgueva al llegar a Valladolid se bifurcaba, era estrechito pero se bifurcaba formando un ramal por el Norte y otro ramal por el Sur. Pero por razones urbanística, de higiene (que dijeron) y por las inundaciones frecuentes que provocaba, desviaron ambos cauces, vamos los taponaron y generaron uno nuevo y único. Las aguas son muy listas y siempre buscan los antiguos cauces, lo cual crea problemas en los bajos de locales, de edificios, etc.
ResponderEliminarPor cierto, en alguna otra parte de este blog sale un puente soterrado que ahora se encuentra en un garaje de nueva planta. Si lo encuentro te lo digo.
Bueno, que como Mérida no he encontrado nada igual, ahí sí que cada vez que se van a hacer cimientos de un edificio nuevo sale ¡Roma entera!